¿Es buena la vaselina en ciclismo?

Tradicionalmente se ha utilizado la vaselina como antrifricción, lubricante y protector para los problemas de rozaduras de los ciclistas. Muchos deportistas tras pasar muchas horas pedaleando en la bici terminan con rozaduras o abrasiones en ingles y muslos, por lo que la “lubricación” de la badana es una práctica muy extendida.

La vaselina es el recurso estrella, por su precio, accesibilidad y tradición, pero ¿es la mejor solución para los problemas de rozaduras en la bici?

La respuesta es no, la vaselina no es la solución para los problemas de piel de la badana y el sillín. Y no lo decimos solo porque nosotros tengamos un producto alternativo 100% natural y más efectivo, que también sino por los siguientes razones:

Problemas del uso de vaselina en el ciclismo:

No soluciona el problema solo lo disimula:

La vaselina es un derivado del petróleo, sí, la de farmacia también, por lo que solo funciona de forma externa a la piel, es decir, crea una capa lubricante externa (al igual que el 3en1 en las puertas chirriantes) sin trabajar el problema, solo que lo disimula (no corrige el desajuste de la bisagra).

No nutre ni hidrata la piel para hacerla resistente al roce.

Necesidad de aplicar mucha vaselina para protegernos de la irritación:

La vaselina no es absorbida por la piel durante la ruta, carrera o etapa por lo que se va desplazando y acumulando en los pliegues y fronteras de la zona de roce perdiendo efectividad a lo largo del entrenamiento. 

Muchas veces incluso es necesario aplicar la vaselina varias veces y en gran cantidad a lo largo de la salida, lo que es contraproducente y un engorro.

Es decir, la vaselina no es una solución duradera a los problemas de irritación de la bici.

La vaselina estropea la equipación:

En el mundo del surf se sabe que la vaselina estropea el neopreno a medio plazo (los fabricantes siempre recomiendan evitar su uso). En cambio en el ciclismo, probablemente por la diferencia de precio de la equipación, no suele preocuparnos tanto que la vaselina estropee la badana, pero la realidad es que sí ocurre.

Uno de los mayores problemas es que la vaselina se aplica directamente sobre la badana impregnándose profundamente en sus fibras haciendo que la limpieza sea muy complicada. Esto tiene dos derivadas: uno que siempre quedan trazas de vaselina y sudor que no consigues eliminar en la lavadora con el consiguiente olorcillo/acartonamiento de la fibra, que además acaba intensificando más el roce.

Y dos, convierte la badana en un ambiente estupendo para el crecimiento de bacterias (humedad y calorcito) favoreciendo la aparición de los temibles forúnculos.

Alternativas naturales a la vaselina:

  • Aceite corporal: almendras, oliva, acéite de bebés…
  • Lanolina: “grasilla” natural que generan las ovejas para aislar su lana de la humedad. 
  • Ceras naturales.

En Najara hemos creado un básamo antifricción o, lo que es lo mismo, una “vaselina” 100% natural que une los beneficios de estas tres sustancias a las que además hemos añadido caléndula y manzanilla por sus propiedades calmantes para la irritación e hinflamación. De este modo hemos creado un producto que actúa en todos los niveles para prevenir las rozaduras e irritaciones sobre la bicicleta y de la badana a largo plazo:

  • Prevención: nutre e hidrata profundamente y a largo plazo tu piel haciéndola más flexible y resistente al roce. Restaura la barrera natural de tu piel ante el roce.
  • Protección activa durante la actividad: crea una capa externa lubricante que absorbe el roce y minimiza la fricción piel con piel y piel con ropa. Gracias a la lanolina y la cera de abejas es absorvida por tu piel por lo que esta capa de protección dura más tiempo y no es necesario llevar un pegote de producto, sino que con una fina capa es suficiente.
  • Cuenta además con ingredientes que ayudan a combatir la acción irritante del sudor como la salvia y el limón que son astringentes.
  • Calma y recupera tu piel tras cada sesión en sus formulación hemos utlizado sustancias antiinflamatorias como la manzanilla, caléndula y aceite de pepita de uva que ayudan a reducir el eccema y a aliviar la sensación de escozor. 

Al tener todos sus ingredientes naturales con un lavado con temperatura caliente normal y el uso de detergentes normales se elimina completamente de la equipación.