Escalar en verano: problemas para tus yemas y manos

Aunque el frío, el viento y la humedad ambiental no son nada buenos para tu piel, el calor extremo que desprenden las piedras, sudor (con su consiguiente uso de magnesio) y el salitre o el cloro de la piscina son aún peores y tus manos lo notan.

En verano es típico que las yemas de los dedos de los escaladores empeoren y que los callos que durante todo el invierno hemos trabajado se desprendan, cuarteen o directamente se arranquen. Pero… todo esto tiene una solución: HIDRATACIÓN, HIDRATACIÓN Y MÁS HIDRATACIÓN.

Ahora que es verano tienes más tiempo o estás pensando en una escapadita de finde a la sierra para dar un par de pegues o lo que se tercie… o incluso atreverte con el psicobloc tenemos una advertencia para ti: debes hacer intensivo de hidratar y fortalecer tu piel ANTES DE IR.

Factores de “riesgo” para nuestra piel si escalas en verano:

  • Salitre, cloro y jabón: contra la creencia popular… dañan tu piel, favorecen su deshidratación y además atacan a la microbiota de tu piel. Por eso los meses de calor debes intensificar tu rutina de hidratación de manos si quieres seguir escalando en buenas condiciones.

El agua y el sudor por otro lado reblandecen tu piel dejándola más indefensa ante rasguños y rozaduras, por lo que cuanto más fuerte venga de base (hidratación diaria) mejor resistirá tus chapuzones, descensos, psicobloc… 

  • Sudor y magnesio: en verano sudamos más y si la piedra está al sol o calentita aún más y la solución en escalada es clara… más magnesio… pero el magnesio a parte de ser bastante contaminante es fatal para nuestras manos. 
    • Horas de sol: ¿Nuestra recomendación? los días de calor madruga más, no vale con que digas bahhh a las 20:00pm ya no da el sol es buena hora… porque el ambiente está recalentado al igual que la piedra. 

    Si quieres escalar más en verano y aprovechar el tiempo M A D R U G A, así que la cerve a las 6pm no a las 23pm y empezar a escalar antes de las 8am.

    Ni que decir tiene que evites las horas de sol directo, ya no por tu espalda y las cantidades ingentes de protector solar que debes usar sino porque según el tipo de piedra y los pegues que des puedes llegar a casa con literalmente quemaduras en las yemas de los dedos.

    Fortalece tus manos para escalar más en verano:

    • Hidratación diaria interna y externa: utiliza cremas con ingredientes hidratantes y oclusivos. Recuerda que el beber agua (AGUA) es básico para mantener tu piel hidratada. Te recomendamos nuestra crema regenerante que además cuenta con ingredientes para ayudar a recuperar tu piel después de cada entrenamiento. O si sufres de callos desprendidos, grietas o daños más intensos en tu piel su versión ultraconcentrada el bálsamo regenerante, de uso nocturno para cuando tus manos necesitan un extra de cuidado.
    • Evita utilizar jabón cada vez que de das una ducha, cada vez lo utilizamos eliminamos la capa de “grasilla” propia de la mano que nos protege de la deshidratación, así que reserva el gel para una o dos duchas a la semana.
    • Aclárate SIEMPRE después de la piscina o el mar, tanto el cloro como el salitre cuanto menos tiempo permanezcan sobre tu piel mejor.
    • Si tienes los dedos ‘arrugaos’ NO escales, tanto si es porque llevas un rato en el agua o porque tus manos no paran de sudar… no es un buen momento de escalar, lo único que vas a conseguir es que se te rajen las yemas y tengas que bajar el ritmo varias semanas.
    • Si notas una yema sensible o un callo débil, encíntate la zona antes de que sea demasiado tarde, te dejamos nuestro post sobre cómo encintar las manos para escalar.